¿Un curso de manipulación de alimentos? ¿El futuro de la alimentación en la costa del sol?
CONTENIDOS
¿Qué comeremos en 2030? Ya hace un tiempo que se presentó la primera hamburguesa sintética pero queremos hablar de cómo se hará la comida, cómo la compraremos y qué tendencias de Consumo aparecerán en los próximos años. Incluso podemos hablar de los alimentos que podremos encontrar en las estanterías de los supermercados de la Costa del Sol en las próximas décadas.
De todos es sabido que manipular alimentos conlleva riesgos, y es por ello que la gente que ha de trabajar en sectores relacionados con este tipo de actividad ha de pasar por actividades formativas como el curso online manipulador de alimentos. Pero hablemos de alimentos y del futuro…
Alimentos funcionales e hiper-personalizados
Hoy en día la personalización de la comida ya empieza. Ahora mismo, podemos encontrar alimentos en cada centro de distribución enfocados a segmentos específicos de la población: religión, edad, conciencia. Esta tendencia se intensificará en los próximos años. No solo eso, los centros tecnológicos de todo el mundo han lanzado una carrera que dará como resultado comida personalizada.
Cultivos y ganado modificados genéticamente – Alimentos modificados genéticamente
Gracias a las nuevas herramientas de modificación genética, los OMG y todos los problemas derivados de ellos se convertirán en algo de principios del siglo XXI. Esta tendencia permite la edición de un solo gen para producir cultivos y animales con características específicas: alimentos con nutrientes en cantidades suficientes para el ser humano, carnes más tiernas, mayor vida útil de los alimentos perecederos, etc.
Agricultura celular y ganadería.
Está llegando el alimento más controvertido que ha comenzado a desarrollarse en los últimos años: la carne artificial. Sin embargo, este alimento lo podemos encontrar en los supermercados de Málaga, Torremolinos o Marbella en unos años, deberá verse junto a la carne de producción tradicional.
Estos alimentos eliminan a los animales de la ecuación y los reemplazan con biorreactores que producirán carne sintética a partir de células, tejidos y nutrientes de amalgama.
La búsqueda de nuevas proteínas vegetales que satisfagan y complementen el alimento vegetal que producen los agricultores ha llevado nuestros ojos al mar. Las algas representan el futuro de los alimentos vegetales para diversos expertos, centros tecnológicos e investigadores. Y no es solo para la alimentación del consumidor, las algas serán la próxima revolución en la agricultura y la ganadería.
Insecto
¿Has visto esa imagen que muestra las larvas de nido de abeja crujientes en la cadena de supermercados holandesa Jumbo en Groningen el 31 de octubre de 2014? A partir del 31 de octubre, los clientes de las tiendas Jumbo de dos ciudades del norte de Holanda podrán añadir albóndigas, hamburguesas y patatas fritas “especiales” a sus carritos de la compra como parte de un plan para colocar productos comestibles con insectos en los estantes de 400 tiendas en todo el país a principios del próximo año.
Desde el filósofo griego Aristóteles, que comía cigarras, hasta los indios Paiute, que usaban grillos quemados como harina rica en proteínas, los insectos han estado en el menú durante algún tiempo. período difícil para entrar en el mercado alimentario europeo. El estigma y las percepciones de los consumidores pueden haber obstaculizado la producción en masa, pero varias empresas han encontrado una forma de evitar la difícil tarea de vender los animales que comemos.
Essento ha entendido la importancia del dicho “comer con los ojos” en el mundo real y ha desarrollado una gama de productos a base de insectos que engañarían incluso a los más escépticos. Desde barras de proteínas, hamburguesas y bocadillos de insectos fritos hasta restaurantes de alta gama como Noma en Copenhague.
Hay platos a base de escarabajos para aquellos que están más interesados en el medio ambiente. Lo hacen de más formas que nunca. Además de su potencial nutricional, destaca el uso eficiente del espacio y los recursos en el cultivo de insectos. Todas estas razones hacen que los alimentos a base de insectos sean una alternativa a considerar.
Impresión 3D
También hemos empezado a verlos en otras industrias, como la construcción o la medicina. Sin embargo, la impresión 3D comenzó su andadura en la alimentación de la mano de startups de todo el mundo.
Eneko Atxa
El chef del restaurante Azurmendi, impulsó el trabajo de grandes proyectos gastronómicos, como el suyo, como portadores de valores.
“Buscamos inspiración en la naturaleza y queremos ser sostenibles utilizando las últimas tecnologías. También nos esforzamos en trabajar con pequeños productores, que es una tarea difícil porque la logística para un restaurante como el nuestro que busca la perfección no lo permite. Hay que buscar intermediarios” explicó.
Además de los aspectos ecológicos y sanitarios de su gastronomía, Atxa también destaca los valores sociales de su trabajo. “Estamos trabajando con el Hospital Galdakao para aprender cómo vivir mejor y luego transmitirlo a otros”, continuó. “Y también queremos transformar la hospitalidad que nos permite conciliar la vida profesional, la oportunidad de desarrollar nuestra pasión, con la vida personal. Por eso solo trabajamos por la mañana excepto viernes y sábados”, concluyó.
El creciente prestigio de cocineros como Atxa y de la cocina en general es un ejemplo de los cambios que se han producido en torno a la comida en las últimas décadas. Algunos en San Sebastián señalaron que las próximas estrellas de rock, las que seguirán el camino ascendente de los cocineros, serán los agricultores.
Al mismo tiempo investigadores del MIT Media Lab Open Agriculture, Hildreth England y Arielle Johnson, presentaron sus ideas sobre cómo hacer que los sistemas alimentarios del futuro sean más atractivos y seductores en la agricultura.
La agricultura del futuro será más abierta, horizontal y con mayor resonancia emocional para más personas. Ante los grandes productores, que luego envían sus productos a largas distancias, imaginamos un futuro en el que solo viaja la información y todos pueden producir al menos parte de sus hortalizas en casa o de forma más local.
Con este fin, crean lo que llaman “computadoras de alimentos”, una especie de invernadero robótico en el que se pueden ingresar todo tipo de parámetros para cultivar alimentos con precisión. Además de poder compartir datos con otros, lo que nos permitiría disfrutar de los tomates de nuestro vecino y pasar información para que puedan disfrutar de nuestras acelgas.
[…] pasado un tiempo desde que se lanzó la primera hamburguesa sintética, y aunque puede ser el futuro de la alimentación, hemos de hablar sobre cómo cocinar, cómo comprar y cuáles serán las tendencias de consumo en […]